martes, 15 de diciembre de 2009

preso de la celda 96




A las siete de la mañana,como cada día ,el carcelero se disponía a despertar uno a uno a todos los presos ,pero aquella mañana no pudo despertar al preso de la celda 96,se hallaba inmóvil y frío en su cama y por mas que lo zarandeó no logró un solo movimiento de su cuerpo inerte.Pronto llegó el medico de la penitenciaría para confirmar lo que ya había pasado por la mente de todos los presentes,estaba muerto,sin razón externa aparente,pero había muerto.
Tras el sepelio se procedió a la limpieza cuidadosa de la celda ,cuando guardaron sus pertenencias para mandarlas a los familiares,hallaron una carta sin terminar encima de la mesita de noche...

Escribirte unos versos quiero,para desnudar mi alma en ellos,para relatarte mi vida en cada uno de ellos,mas se que no bastaría para llenar ese gran vacío que voy creando día a día con mi indiferencia.
A menudo buscamos enemigos a nuestro alrededor,que necios,el mayor enemigo lo llevamos en nuestro interior,sólo nosotros somos capaces de hacernos un daño profundo e irreparable,imposible de superar por nadie que no seamos nosotros mismos.Con todo esto no intento disculpar mis actos,es mas,el perdón no importa,ya pasó,solo pretendía con estas palabras echarme encima toda la tierra que yo mismo cavé.
Ahora desde mi oscura celda pienso tanto en ti que me duele,como pude hacerlo,a ti que llenaste mi vida como nadie mas pudo hacerlo,a ti que siempre me lo perdonaste todo,a ti que siempre fuiste mi respuesta para todo,jamás me lo perdonaré.
Realmente sé que nunca podrás leer esta carta,ni sentir todo lo que yo siento ahora mismo,aunque sé que en el fondo de tu corazón sabias que,a mi manera,te quise de verdad,con toda el alma,como sólo se debería amar,pero no pude reprimir las ansias de hacerte daño,no puedo escapar de ti,porque tu eres yo y yo soy tu.
"Mañana será otro día",eso pienso a veces,"irá pasando el tiempo e irás olvidando todo el mal que has hecho",por mas que mi mente intente una y otra vez autoconvencerse de que todo pasará,sé que no será así,porque...No habrá un nuevo día para ellos,nunca mas y tampoco debiera haberlo para mí,si existe un dios de verdad espero que me hunda en la mas absoluta miseria,pues solo eso merezco,eso y mas,mucho mas....
Sabes,tengo una pesada carga sobre mis espaldas desde entonces y por mucha condena que me imponga el juez no conseguirá hacerla mas llevadera,"no habrá pena lo suficientemente severa como para limpiar mis manos de toda la sangre que derramé impunemente".
A pesar de todo...

¿Cuántas almas cuestan las victorias?

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